LA VISION DE LA IGLESIA CRISTIANA EVANGELICA DEL CENTRO
Es el sueño de un lugar en donde los heridos, deprimidos, los frustrados y los confundidos puedan encontrar amor, aceptación, ayuda, esperanza, perdón, guía y ALIENTO.
Es el sueño de comunicar las buenas nuevas de Jesucristo a los ciento de miles de personas residentes en Asunción y Gran Asunción.
Es el sueño de darle la Bienvenida a 1.000 miembros integrándolos a la comunión de la familia de nuestra iglesia, amando, aprendiendo, riendo y viviendo unidos en armonía.
Es el sueño de guiar a las personas a la madurez espiritual a través de estudios bíblicos, de grupos pequeños, de clubes bíblicos de jóvenes, seminarios, campamentos, y un Instituto Bíblico para nuestros miembros.
Es el sueño de preparar a cada creyente para un ministerio significativo ayudándole a descubrir los dones y talentos que Dios le ha dado.
Es el sueño de enviar a misioneros y obreros por todo el mundo, dotando a cada miembro con la autoridad para tener una misión personal en este mundo. Es el sueño de comenzar, por lo menos una iglesia hija cada dos años y un club bíblico nuevo cada año.
Es el sueño de tener, por lo menos, 3.000 metros cuadrados de terreno, para construir una Iglesia, con dependencias hermosas pero sencillas, que incluyan un centro de culto para 1.000 personas, un centro de consejería y oración, salones de clases y un área de recreación con canchas de Fútbol, voleibol y básquetbol.
Es el sueño de tener pastores a tiempo completo para la edificación de los miembros de la Iglesia y un pastor para el área de música, con el objetivo de que tengamos un excelente ministerio de música.
Es el sueño de tener varios Ómnibus que recorran toda la ciudad cada día de reunión en busca de miembros que no tengan medios para llegar a la Iglesia.
Es el sueño de una radio FM y programas televisivos que prediquen el mensaje del Evangelio con un dinamismo que impacte en la vida de las personas.
Es el sueño de un Colegio Cristiano para la comunidad que apoye la labor de la Iglesia.
Todo esto se creará para ministrar a la persona en su totalidad, espiritual, emocional, física y socialmente, en medio de un paisaje tranquilo, con árboles y flores, que resulte inspirador.